Se suele llamar ejercicio anaeróbico a aquel que es lo suficientemente intenso como para disparar el metabolismo anaeróbico. Suele utilizarse por atletas en deportes que no se centran en la resistencia para aumentar la fuerza y velocidad, y por los fisicoculturistas para aumentar la masa muscular. Los músculos que se han entrenado utilizando ejercicio anaeróbico se desarrollan de una forma distinta que aquellos que sufren ejercicio aeróbico.
Esto lleva a que nuestros músculos sean capaces de una gran capacidad en cortas duraciones, en especial actividades de alta intensidad que tienen un rango de duración desde unos pocos segundos a alrededor de 2 minutos. Cualquier actividad que persista luego de esos dos minutos tendrá un gran componente metabólico aeróbico.
El metabolismo anaeróbico es una parte natural del consumo de energía de todo el cuerpo. El músculo esquelético de rápidos movimientos opera utilizando sistemas metabólicos anaeróbicos, de modo tal que cualquier requerimiento de estas fibras musculares llevará a un aumento de gasto de energía anaeróbica. El ejercicio intenso que tarda hasta alrededor de cuatro minutos puede considerarse ejercicios anaeróbico de todas formas.
Por otro lado, el ejercicio aeróbico incluye actividades de menor intensidad, pero realizadas por mayores períodos de tiempo. Se trata de actividades como caminar, correr, entrenamiento a intervalos, natación y ciclismo, que requieren de grandes cantidades de oxígeno para generar la energía necesaria para el ejercicio prolongado. Dentro de deportes que requieren de “explosiones” cortas de ejercicio en gran cantidad, se trata del sistema anaeróbico el que permite a los músculos recuperarse entre intervalos. El entrenamiento para cualquier deporte en general requerirá que ambos sistemas se desarrollen.
Originally posted 2011-05-31 00:01:00.